“Luchando por el futuro de nuestros hijos” es el nombre del bus tour de la Alianza para la Educación Católica de la Universidad de Notre Dame (ACE) que hizo una parada en la Escuela St. Rose of Lima, de la Arquidiócesis de Denver el pasado 12 de marzo.
El tour viene recorriendo 50 ciudades del país y fue lanzado por ACE con ocasión de su vigésimo aniversario. Desde octubre del 2013 hasta mayo del 2014, el equipo de ACE estará viajando a través del país para visitar aquellas escuelas católicas donde se encuentren sus profesores.
Los asociados de ACE cuentan con más de 100 colegios en 15 estados, sirviendo en 26 diócesis.
ACE ofrece profesores y administradores a colegios ubicados en comunidades con mayor índice de pobreza, para asegurar el acceso a una educación católica de calidad para estudiantes de bajos recursos. La alianza del servicio a través de la enseñanza (Service Through Teaching program) acepta a 90 postulantes por año. Los participantes enseñan en colegios católicos seleccionados por dos años, con un salario básico.
Durante este tiempo completan un currículum que les permite acceder a una maestría en educación de la Universidad de Notre Dame. El 75% de más de los más de 1,300 graduados del programa, trabaja en educación, y la mayoría de ellos en educación católica.
En la mañana del 12 de marzo, mientras el bus se acercaba a la escuela St. Rose of Lima, los 250 alumnos alineados en la calle rompieron en gritos de bienvenida y gratitud.
Del bus bajaron el P. Lou DelFra, de la Congreagación Holy Cross y varios miembros de ACE. La escuela St. Rose of Lima era parada obligatoria del tour, pues como señaló John Staud, Director de formación pastoral y administración de ACE, “éste es uno de los colegios en los que comenzamos nuestra labor, y ha florecido desde entonces”, según Staud, “mucho se debió al liderazgo de Jeannie Courchene, -ex directora de St. Rose-, y ahora al de Tracy Alarcón y del Padre Jerry Rohr, un gran párroco”.
Staud considera a St. Rose of Lima un gran éxito. Refiriéndose al vecindario, de bajos ingresos y predominantemente latino, indicó que “si miras la demografía del lugar, podrías decir: bueno, este colegio podría cerrar en cualquier momento. Pero gracias a su gran liderazgo y espíritu, la escuela es excelente y está llena de alumnos.”
Según Alarcón, en su quinto año como directora, la escuela cuenta con suficientes alumnos, pero sus finanzas son una constante preocupación. “El 90% de nuestros niños están bajo los niveles de pobreza” dijo. “La mayoría de ellos están becados, lo que nos pone en una posición de dependencia con respecto a las donaciones. Siempre tenemos preocupaciones financieras”.
Asimismo, Alarcón aprecia el vínculo entre St. Rose of Lima, el primer colegio católico de aprendizaje expedicionario en el país, y la universidad. “Cada año Notre Dame y ACE siguen proveyendo a nuestro colegio de docentes calificados. Son estupendos modelos para nuestros estudiantes. Somos bendecidos y estoy muy agradecida”, señaló la directora.
Hay seis profesores de ACE en St. Rose, y ha habido 26 en la historia del establecimiento, incluyendo a Elias Moo, el actual Director Asistente. También hay profesores de ACE en otras escuelas católicas de Denver: Annunciation, Guardian Angels, St. Therese y St. Pius X. Por el momento, hay aproximadamente 50 profesores miembros de ACE, entre miembros y ex miembros, trabajando en colegios católicos de la arquidiócesis.
Misa de acción de gracias
Luego de la llegada del bus, la comunidad escolar se dirigió a la iglesia para agradecer el apoyo de ACE a través de una Misa presidida por Mons. Samuel Aquila, Arzobispo de Denver. “Entusiasma mucho ver (todo lo que se ha logrado acá)”, dijo el arzobispo a la congregación al final de la misa. “Cuando regresé a Denver, hace alrededor de un año y medio, una de las sorpresas que tuve fue que St. Rose of Lima seguía en pie y le estaba yendo muy bien. Fue un regalo”.
Después de la misa los alumnos de octavo grado dirigieron una reunión en el gimnasio de la escuela, seguidos por una presentación en honor a Joanne Horne y Ralph y Trish Nagel, cooperadores del proyecto.
