En una cultura donde se anima a las mujeres a usar anticonceptivos hormonales para que puedan expresar libremente su sexualidad, es difícil pensar que existen métodos de planificación familiar que “apaguen” la fertilidad.
A medida que la ciencia y la fe trabajan juntas, se nos presenta otra opción; una que reconoce la dignidad y la belleza de la mujer y su fertilidad.
¿Qué es la Planificación Familiar Natural (NFP, por sus siglas en inglés)? En pocas palabras, el diácono Colin Coleman, especialista en NFP y matrimonios de la arquidiócesis de Denver, lo explicó como “observar el ciclo de la mujer y saber que, si la pareja tiene esa apertura a la vida, sabrán cuándo pueden concebir más fácilmente. Y si hay una buena razón objetiva para querer posponer un embarazo, también lo pueden saber”.
Christy Garbus, MSN, RN, y una de 4 colaboradoras de Big Life Integrative Health, una clínica provida recomendada por el programa NFP de la arquidiócesis para atención médica holística, encuentra una belleza profunda en las enseñanzas de la Iglesia sobre la Planificación Familiar Natural y ayuda a las parejas a utilizarla.
Christy cree que el componente teológico es lo que diferencia la NFP de otros métodos de fertilidad.
“Trabajar con tu fertilidad natural en realidad protege la relación matrimonial porque desafía a la pareja a invitar a Dios a la relación y al proceso de planificación familiar”, dijo a El Pueblo Católico.
Los que están casados saben que la vocación requiere sacrificio, compartió Christy, reflexionando sobre la importancia del sacrificio saludable en la vida cristiana y en la práctica de la NFP.
“Creo que un componente teológico que hemos perdido es reconocer que el matrimonio es sacrificio y que la NFP es un principio fundamental de eso porque estás eligiendo abstenerte y sacrificar”, dijo.
Entre otros beneficios, Christy dice que practicar la planificación natural en pareja también puede llevar a una menor probabilidad de divorcio.
“Es realmente hermoso. Cuando las parejas entran en la NFP juntas con entendimiento y amor mutuo, la tasa de divorcio disminuye, porque cuando trabajas activamente para amar a tu cónyuge y erradicar la lujuria en tu relación y dejas entrar a Dios en la relación, se solidifica la base de tu matrimonio”, compartió Christy.
Aunque la Biblia no habla explícitamente sobre NFP, el diácono Colin dijo que podemos ver el tema bíblico de la dignidad humana para entender el componente profundamente teológico de la práctica diaria.
“La Biblia siempre ha hablado fuertemente sobre la dignidad de la vida humana. Habla sobre el respeto, la belleza y dignidad de las mujeres”, expresó.
“El papa Juan Pablo II incluso escribió una carta a las mujeres, destacando el genio femenino”, continuó el diácono. “Y el catecismo habla sobre la responsabilidad y la generosidad al planificar una familia. Nos enseña a ser generosos y abiertos a la vida, pero también enseña la paternidad responsable, porque Dios puede estar llamándote a no tener hijos”.
Una práctica hermosa, la Planificación Familiar Natural a menudo es desconocida, no practicada y mal entendida. De hecho, una de las principales razones por las que las parejas no practican la NFP es por falta de comprensión, dijo Christy.
“Mucha gente escucha ‘NFP’, pero no entiende, porque la mayoría de nosotros no estamos realmente educados sobre cómo funcionan nuestros cuerpos”, agregó. “Entonces, muchas parejas llegan a la preparación matrimonial, y se les dice que deben tomar una clase de NFP, y su primera pregunta es ‘¿qué es eso? ¿Por qué tengo que hacerlo? ¿por qué la Iglesia tiene que estar en mis asuntos?’»
“No todos vienen desde un lugar de amor cuando están aprendiendo estas cosas, por lo que es importante invitarlos con amor para que aprendan y lo adopten, porque entonces podemos invitarlos de vuelta a la Iglesia. Y nos aseguramos de que esta enseñanza sea universal y homogénea para que todos aprendan el mismo mensaje de amor”, continuó.
El diácono Colin explicó que donde hay dudas, necesita haber más del ‘por qué’ detrás de la Planificación Familiar Natural.
“Solo han escuchado la historia de los anticonceptivos. Han visto las revistas con una chica joven y hermosa en un vestido de verano en un campo de flores silvestres. Luego tienes a este diácono o sacerdote viejo diciendo que necesitas practicar la planificación natural, y ellos dicen ‘¡como no!'» compartió el diácono.
Dado que muchas personas están inundadas con la mentalidad anticonceptiva de nuestra cultura actual, es importante celebrar y abrazar la NFP, que fomenta la comunicación y el respeto mutuo entre las parejas.
Christy aborda su ministerio con gratitud por las parejas que encuentra en sus clases.
“Enseño preparación matrimonial y encuentro muchas parejas que solo está en mi clase porque es un requisito para poder casarse en la Iglesia Católica, y tengo la oportunidad de educarlos sobre cómo funcionan sus cuerpos y otras opciones además de los anticonceptivos hormonales», dijo Christy.
“Muchas mujeres también vienen a mi clase porque las han puesto en hormonas sintéticas o la píldora para problemas médicos que están intentando tratar, y no se les presentaron otras opciones. Así que enseño cómo podemos abrazar su fertilidad y trabajar con ella en lugar de en su contra”, concluyó.
¿Por qué es necesaria la revitalización de la Planificación Familiar Natural? Según Christy, es porque ya no vivimos en la Cristiandad.
“La ‘norma’ se ha convertido en que todos utilicen anticonceptivos y vivan en unión libre antes del matrimonio», dijo, reflexionando sobre la era apostólica en la que nos encontramos. «Donde solíamos encontrar parejas que estaban emocionadas de aprender y entender su fertilidad, ahora nos encontramos con parejas que están inundadas con las normas de la cultura, y han perdido el deseo de aprender”.
En resumen, en un mundo en el que las personas están inundadas con mensajes contrarios a la verdad de la persona humana, la belleza de las enseñanzas de la Iglesia sobre la humanidad, la sexualidad, el matrimonio y la familia necesita ser proclamada de nuevo.
“Confía en que la Iglesia te ama y te quiere. Creo que hemos olvidado que cada uno de nosotros es bueno y muy hermoso, y tenemos una dignidad increíble”, concluyó el diácono Colin, compartiendo un recordatorio a las parejas que se preparan para casarse. «Entonces, para una pareja que se va a casar, mi consejo sería que la NFP es una gran herramienta para que un hombre vea la belleza de su esposa. Y la planificación natural es una gran herramienta para que la mujer vea su belleza y su dignidad”.
Para más información sobre la Planificación Familiar Natural y encontrar una clase cerca de ti, visita https://archden.org/eflm/nfp/.