Ricky Johnson es un voluntario excepcional de Caridades Católicas que se rige por la filosofía de “devolver el favor” que comienza con amor y conduce a un cambio real para innumerables personas. Como fundador de Kingdom Cuts, una organización cristiana sin fines de lucro dedicada a cambiar el mundo un corte de cabello a la vez, la misión de Ricky es servir a la comunidad a través del corazón y los ojos de Dios, difundiendo su amor y mensaje de esperanza a través de sus servicios.
En agosto, Ricky fue un invitado especial en una de nuestras reuniones del programa de Kinship de Caridades Católicas en el condado Weld. Nuestro programa de Kinship proporciona apoyo y recursos a abuelos, parientes o amigos de la familia que están criando niños en ausencia de los padres de los niños. El programa ofrece orientación, acceso a recursos legales, asistencia financiera y apoyo emocional, ayudando a los cuidadores familiares a navegar los desafíos de criar a niños, mientras promueve la estabilidad y el bienestar familiar.
Nuestros programas siempre están buscando maneras de aliviar las cargas de estas familias y tocar sus vidas de maneras grandes y pequeñas. La visita de Ricky tuvo un impacto simple pero profundo.
Ricky cree que “un corte de cabello no puede cambiar tu vida, pero DIOS sí puede”. Su enfoque guiado por Dios honra la dignidad de todos los que se sientan en su silla. En una tarde, Ricky pasó tiempo con más de una docena de niños del programa de Kinship, asegurándose de brindarles la atención que cada uno merecía. Cada corte duró entre 30 y 45 minutos y cumplió con los deseos de cada niño: algunos querían un nuevo corte o un corte limpio para mostrar sus sonrisas brillantes. La positividad y aliento de Ricky contagiaron al grupo, llenándolos de energía y animándose mutuamente después de su turno en la silla. Aportó un renovado sentido de compañerismo a través de sus cortes. Para muchos de nosotros, un corte de cabello es una parte normal o incluso mundana de la vida, pero para estas hermosas familias, el tiempo dedicado a preparar a sus pequeños para regresar a la escuela con un nuevo corte de cabello hizo una gran diferencia.
Kingdom Cuts nació del sueño de Ricky de utilizar sus habilidades para hacer una diferencia. La organización sin fines de lucro comenzó de manera humilde. Al principio, Ricky viajaba con su kit de barbero y una silla de camping en su auto, y pasaba tiempo con cualquiera que necesitara un corte de cabello o un amigo. Más tarde, consiguió una camioneta que se convirtió en una peluquería móvil que lleva directamente a las comunidades que sirve.
Los niños en nuestros programas de Kinship a menudo cargan con el peso de circunstancias difíciles y encuentran consuelo y confianza a través de pequeños actos de bondad. Al asistir a una reunión de Kinship y ofrecer cortes de cabello, Ricky ayudó a cada uno de estos niños a sentirse valorados y cuidados.
A través de su espíritu generoso y su compromiso inquebrantable, Ricky Johnson se ha convertido en más que un barbero; se ha convertido en una luz para otros, demostrando que incluso los actos más pequeños de bondad pueden transformar la vida de los demás.
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Para ser voluntario en los ministerios de Caridades Católicas, visita https://ccdenver.org/volunteer/
