Si le preguntas a Patrick Nieukirk por qué asumió el liderazgo del Ministerio de Hombres de Summit, no empezará con la estrategia ni con los números. Empezará con la hermandad.
“Hoy en día, los hombres están aislados”, explicó Patrick. “Dejan a sus familias y luchan contra la adicción y la soledad. Uno de cada tres hombres en las bancas de la iglesia no tiene verdaderas amistades masculinas en su parroquia. La hermandad fortalece a los hombres. Fortalece a las familias. Fortalece a la Iglesia. Por eso hago esto”.
Patrick es el director ejecutivo de Summit Men, un ministerio católico de hombres con base en la Arquidiócesis de Denver. Asumió el cargo después de años de participación en la vida parroquial, el desarrollo de liderazgo y la ayuda personal. En un momento crucial, cuando el exlíder del grupo, Dan Donaldson, se mudó fuera del estado, le ministerio Summit Men se enfrentó a una duda, ¿deberían finalizar, fusionarse con otro grupo o alguien más asumiría el liderazgo? Cuando se le presentó la oportunidad de liderar, Patrick aceptó.
“No era un título que buscara”, dijo. “Pero Dan me animó. Me dijo: ‘Ya has hecho el trabajo. Ayudaste con la conferencia, dirigiste la capacitación de liderazgo, tienes las habilidades necesarias’. Así que dije que sí”.
Esas habilidades provienen de décadas de experiencia en liderazgo empresarial, incluyendo puestos de ventas y gestión regional en importantes empresas tecnológicas. Pero para Patrick, la labor de formar hombres católicos no se trata de replicar el mundo corporativo, sino de capacitar líderes para la misión.
“El objetivo no es solo una buena conferencia”, dijo. “Es lo que viene después. ¿Qué hacemos para formar hombres en discípulos misioneros en sus parroquias, en sus decanatos y en sus familias?”
Esa es la pregunta que Summit Men busca responder. El ministerio ha organizado tres conferencias anuales, la más reciente en la parroquia Queen of Vietnamese Martyrs, con la participación de oradores destacados como el Dr. Edward Sri, el padre Doug Grandon y Andrew McGowan, director ejecutivo arquidiocesano de Evangelización y Ministerios Familiares.
Pero después de esas conferencias, Patrick y su equipo se dieron cuenta de que un evento no es suficiente.
«Es bueno tener un orador de renombre», dijo, «pero si no hay seguimiento, ¿cuál es el impacto duradero?».
Para responder a esta pregunta, Summit Men lanzó esta primavera un programa de formación de líderes de ocho semanas en dos sedes: una dirigida por Patrick y otra por el diácono Steve Stemper, cofundador del grupo. El programa reunió a hombres de varias parroquias y se centró en el liderazgo misionero práctico, basándose en el modelo de multiplicación espiritual popularizado por FOCUS.
«No fue solo un curso. Fue un taller para construir relaciones», explicó. “Algunos eran nuevos en el ministerio de hombres, mientras que otros ya lideraban. Creamos una hermandad, y así es como se llega a los hombres. Así es como se forman líderes”.
La capacitación es solo una parte de una visión más amplia: regionalizar el ministerio en toda la arquidiócesis conectando directamente con los 13 decanatos regionales. Patrick visitó personalmente más de una docena de grupos de hombres en los decanatos de Boulder y Centro Oeste, y Summit Men ahora también trabaja para formar líderes en las comunidades hispanohablantes.
“Queremos estar alineados con la parroquia y el decanato. Ahí es donde se desarrolla la misión”, dijo.
Patrick ve la creciente red no como una competencia con los grupos de hombres existentes, sino como una forma de unirlos y fortalecerlos. Summit Men ofrece recursos, visibilidad, capacitación y, quizás lo más importante, un impulso hacia la misión.
“No se trata de unirse a Summit Men”, dijo. “Se trata de unirse al grupo de hombres de su parroquia y asumir el liderazgo allí”. En cuanto al futuro, Patrick espera organizar eventos regionales más pequeños, además de la conferencia anual, como caminatas entre padres e hijos, charlas literarias o reuniones informales como el encuentro espiritual al que asistió con el padre Nathan Cromley en una cervecería local.
“Atrajo a un público diferente”, dijo. “Fue accesible. A veces, los hombres solo necesitan una invitación y un espacio donde se sientan cómodos”.
La idea de invitación, acompañamiento y misión es la base de todo lo que Patrick está construyendo.
“Jesús me dio las habilidades que usé en los negocios. Ahora las estoy usando para llegar a los hombres, para guiarlos hacia un discipulado más profundo y para forjar amistades que importan”, dijo. “Esta es una manera de evangelizar y construir la Iglesia. Todo comienza con la hermandad”.
Para más información sobre Summit Men o para encontrar un grupo católico de hombres en su zona, visita summitmen.co
En reconocimiento a su liderazgo y labor para fomentar la hermandad, Patrick ha sido reconocido como el Discípulo del Mes de la Colecta Anual del Arzobispo. Su amor es un testimonio inspirador de la necesidad de compañerismo fraternal en nuestra iglesia.
+++
¡Felicidades, Patrick, por ser nombrado Discípulo del Mes de la Colecta Anual del Arzobispo!
¿Conoces a alguien que sea un administrador excepcional? ¡Nomínalo aquí y podría convertirse en el próximo Discípulo del Mes!
