“Al celebrar tantos años de matrimonio, ustedes dan testimonio al mundo de lo que significa estar en Cristo. Y es ahí de donde viene la paz y la alegría que nadie nunca les podrá quitar». Así dijo el Arzobispo de Denver en la Misa que celebró en la Catedral de la Inmaculada Concepción, para celebrar a las 200 parejas que cumplían 25, 50 o más años de matrimonio.
Mons. Aquila señaló que el sacramento del matrimonio implica que uno constantemente tenga que poner a su esposo o esposa primero, entregándose totalmente a él o ella; y añadió que “eso no es posible a menos que uno esté profundamente arraigado en la fe, en Dios, poniéndolo a Él como el centro de sus vida».
«Es precisamente esa fe en Cristo la que ha traído la verdad a sus matrimonios, les ha permitido perseverar, perdonarse el uno al otro, soportarse el uno al otro, amarse el uno al otro, sufrir juntos y experimentar la alegría y la paz que también existen», dijo el Arzobispo a la congregación que llenaba la Catedral.
La celebración Eucarística de estas parejas de matrimonio, se ha convertido ya en una tradición en la Arquidiócesis de Denver, y una manera de honrar y acompañar a las parejas de esposos que viven la fidelidad, y son ejemplo para muchos otros.