Con apenas 45 alumnos desde Kínder a segundo grado de primaria, Escuela Guadalupe abrió sus puertas en otoño de 1999. Aunque era un grupo pequeño, los sueños y los retos eran muy grandes.
“Queríamos responder a las necesidades de la comunidad, donde los funerales de jóvenes aumentaban, muchos de ellos debido a su involucración con pandillas; el número de niños que abandonaban la escuela y el porcentaje de embarazos en adolescentes era altísimo, y por otro lado, había una muy baja asistencia a universidades”, dijo a El Pueblo Católico David Card, Presidente de la Escuela.
Después de un estudio exhaustivo, se llegó a la conclusión que los residentes de la zona -altamente hispana- necesitaban una escuela que ofreciera educación primaria de calidad, valores católicos, y que honrara la cultura de sus familias.
“Los fundadores empezaron a soñar en cómo sería este colegio, que sirviera a las necesidades de esta área y de la parroquia Our Lady of Guadalupe, en Denver”, señaló el Presidente. Entonces, muchas escuelas en zonas hispanas, no ofrecían programas en español.
“Para nosotros –dijo Card- el español significaba un don y una oportunidad”. Reconocer “el lenguaje, la cultura y la fe de la herencia hispana, fue y es una de nuestras riquezas”, dijo Card, así como una de las razones por las que hoy, Escuela Guadalupe ha expandido sus servicios fuera del Highlands Denver. Su programa bilingüe ha atraído a familias de diferentes zonas de la ciudad.
“A lo largo de estos años, hemos visto un cambio en el vecindario; nos alegra seguir aportando al desarrollo de nuestra ciudad y mantenemos nuestro objetivo de ofrecer a los padres de familia una educación católica y bilingüe para sus hijos, además de un hogar”, señaló Card.
Maribel Maturo, profesora de español en Escuela, dice que el espíritu de familia es una fortaleza. “Es una comunidad muy unida y católica. Yo enseñé antes en una escuela pública, y cuando llegué a la Escuela Guadalupe noté la gran diferencia”.
Y algo muy importante, según Maribel, es que “los padres están sumamente involucrados con sus hijos y comprometidos con la misión de Escuela, verdaderamente quieren que sus hijos se superen. Tenemos un camino espiritual a seguir y eso nos da un norte en nuestra misión”.
Hoy Escuela cuenta con 118 alumnos (llegando casi al máximo de su capacidad), 90% de los cuales son hispanos. Tiene grados desde kínder hasta 5to. de primaria y según el Presidente, están explorando la posibilidad de expandirse y ofrecer pre- kínder y middle school.