Dentro de los cinco lugares de peregrinación que la arquidiócesis de Denver ha asignado para el Año de la Misericordia se encuentra la parroquia Our Lady of Guadalupe.
Durante este Año Santo, el Papa Francisco concedió a los obispos de cada diócesis a erigir algunas parroquias o santuarios como lugares especiales de peregrinación. Esto significa que, quien visite esta iglesia durante el presente Año Santo, podrá obtener indulgencia plenaria.
Por ello el pasado 13 de diciembre fue abierta en esta parroquia la Puerta Santa, en una eucaristía en español presidida por monseñor Bernard Schmitz, vicario para el clero de la Arquidiócesis de Denver.
El Padre Benito Hernández, párroco de Our Lady of Guadalupe dijo que este es “un signo muy fuerte para la comunidad hispana y un regalo de la misericordia de Dios con nosotros”.
“Los hispanos estamos sufriendo mucho por la situación legal que viven tantos hermanos. María viene como madre y muchas personas van a tener un lugar donde ir y sentirse acogidos por la misericordia de Dios”, aseguró el Padre Benito.
Para el crecimiento espiritual
Como lugar de peregrinación, Our Lady of Guadalupe está preparando varias actividades que se realizarán a lo largo de este Año Santo. Todos los domingos antes de misa se rezará la Coronilla de la Divina Misericordia. A las 3pm se realizará la Hora de la Misericordia con exposición al Santísimo y confesiones. “Estamos preparando un confesionario más”, cuenta el Padre Benito. Del 27 de febrero al 4 de marzo se realizará la Misión de la Misericordia, con conferencias a cargo del sacerdote argentino Diego Maximino, miembro de la congregación de los padres marianos de la Inmaculada Concepción. Los días previos al Domingo de la Divina Misericordia, habrá charlas y retiros sobre el tema.
Además la parroquia está organizando una peregrinación a Roma y Polonia que se llevará a cabo entre los meses de septiembre y octubre.
La misericordia nos hace ver que “Dios nos busca pero nosotros nos hacemos los escurridizos, nos escondemos. ¡Qué bonito signo para nosotros ver que es tan grande la misericordia de Dios! Que la podemos sentir en la presencia de nuestra madre la que nos protege, nos cuida, nos perdona”, concluye el Padre Benito.
¿Cómo obtener una indulgencia plenaria?
– Realizando una breve peregrinación hacia la Puerta Santa, abierta en cada catedral o en las iglesias establecidas por el obispo diocesano.
– Realizando una o más obras de misericordia, sea corporales o espirituales.
– Los enfermos y personas ancianas que no pueden salir de casa pueden ofrecer su enfermedad como experiencia de cercanía al Señor. Ellos pueden obtener indulgencia plenaria recibiendo la comunión o participando de la Santa Misa o cualquier otra oración comunitaria, también a través de los medios de comunicación.
– Los presos podrán obtener indulgencia plenaria en las capillas de las cárceles y cada vez que atraviesen la puerta de su celda, como símbolo de la Puerta Santa, dirigiendo su pensamiento y la oración al Padre.
– También se puede pedir indulgencias para algún difunto, para que el Padre los libere de toda pena temporal y, en caso de que estén en el Purgatorio, puedan ir directamente al cielo.
– Cada vez que se recibe una indulgencia plenaria es necesario disponer el alma con las siguientes prácticas:
- Estar en gracia de Dios: Habiéndose confesado 20 días antes o 20 días después y estar libre de cualquier pecado mortal que no haya sido confesado.
- Renunciar a cualquier apego u obstinación a cualquier tipo de pecado, incluyendo el venial.
- Ofrecer la comunión por las intenciones del Santo Padre y rezar por él un Credo, un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.
