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sábado, abril 27, 2024
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Comunidad católica de Denver ha hecho mucho por los migrantes, pero falta más por hacer

Por Caridades Católicas

La cuadra donde se encuentra Samaritan House en el centro de Denver siempre está llena de actividad. Desde la mañana hasta la noche, los voluntarios suben las escaleras para ayudar al equipo de Caridades Católicas a servir comidas, personas generosos pasan por el almacén para dejar donaciones, y el personal experimentado trabaja directamente con familias, mujeres solteras y veteranos para encontrar los recursos que necesitan para conseguir trabajo y vivienda permanentes.

En los últimos días la cuadra ha estado más ocupada que nunca con la reciente llegada de migrantes a Denver. Algunos se quedan solo unas horas antes de dirigirse a su destino final, mientras que otros comienzan a hacer planes para conectarse con familiares que ya viven en Colorado. Algunos de los afortunados han podido encontrar refugio temporal en Samaritan House, mientras que otros todavía están trabajando con la ciudad de Denver y otras agencias para encontrar un lugar donde vivir. Aún así, mientras resuelven esos detalles, Samaritan House ha encontrado formas fundamentales de ayudar gracias a la generosidad de la comunidad.

Las filas se forman desde temprano los siete días de la semana y están llenas de familias, mujeres y hombres que aprecian profundamente recibir almuerzos, ropa limpia, abrigos, cobijas y otras necesidades que el equipo del almacén de Samaritan House les entrega con una sonrisa y una palabra de consuelo.

Mucho se puede decir, y se ha dicho, sobre la situación que ocurre en la frontera sur, y casi todo el mundo tiene opiniones firmes al respecto. Pero en el centro de los desafíos políticos se encuentran personas confundidas y asustadas que están a miles de kilómetros de casa, tienen frío y hambre, y agradecen cualquier apoyo que puedan encontrar.

Para muchos, ese apoyo lo encuentran en el equipo del almacén de Samaritan House, que pasa sus días clasificando los materiales donados de primera necesidad, preparando sándwiches y llenando bolsas de papel que se entregan a cada persona que tiene hambre. Ver a los que reciben esta ayuda, muchos de los cuales son niños pequeños, sentarse en la acera y devorar el contenido de la bolsa es a la vez conmovedor y desgarrador.

Tal como lo hicieron cuando los migrantes comenzaron a llegar a nuestro estado en noviembre del 2022, todo el equipo de Caridades Católicas se ha apoyado en su misión de extender el ministerio sanador de Jesucristo a los pobres y a los necesitados. En respuesta a la demanda de refugio familiar adicional el año pasado, el equipo de Samaritan House entró en acción y convirtió el espacio disponible, como las salas de conferencias y las oficinas, en salas familiares adicionales. Ahora, en lugar de albergar a 25 familias a la vez, Samaritan House alberga, alimenta y apoya a más de 35 familias cada noche.

Más recientemente, cuando el aumento de familias comenzó a afectar a Denver este verano, los equipos de alimentos y almacenes de Caridades Católicas entraron en acción nuevamente e intensificaron la creación de más almuerzos. Solo en octubre, voluntarios y empleados prepararon y distribuyeron más de 3000 bolsas de almuerzo a las personas que tocaron a la puerta. Esto se suma a las más de 500 000 comidas que cocinan cada año para los vecinos de la comunidad de Samaritan House y los programas de educación infantil temprana de Caridades Católicas.

El personal y los voluntarios de Samaritan House han preparado miles de bolsas de comida para repartir entre los migrantes en los días transcurridos desde la llegada de un flujo de inmigrantes a Denver. (Foto provista).

Los alimentos son siempre una combinación de artículos donados y comprados, que conforman comidas sólidas y saludables. Un lunes soleado a principios de noviembre, familias y grupos de hombres y mujeres hacían fila, esperando su turno en el almacén para recoger artículos para el clima, como suéteres, abrigos y cobijas para prepararse para las noches frías que pasaban en las calles. Cada uno recibió uno de los almuerzos que habían sido preparados cuidadosamente por el equipo de cocina y los voluntarios de Samaritan House y la mayoría se sentó inmediatamente en la acera para comer los abundantes sándwiches de carne, las papas fritas, el puré de manzana y las barras de proteínas. Cada persona que recibió una comida agradeció al equipo y expresó su profunda gratitud.

Una de las increíbles mujeres que ayuda a administrar el almacén de Samaritan House contó la historia de una familia joven que había pasado por el almacén ese mismo día con su bebé, que parecía tener menos de dos meses. Se les había agotado el tiempo del programa de refugio para inmigrantes de Denver y no estaban seguros dónde pasarían la noche. Estaban preocupados por la salud del bebé. Nuestro equipo trabajó diligentemente para encontrar la mayor cantidad posible de ropa abrigada y cobijas para la familia. Pero, mientras contaba la historia, los ojos del miembro del equipo de Caridades Católicas se llenaron de lágrimas, sabiendo que el futuro de la familia era incierto y difícil.

Durante las últimas semanas, cuando la Arquidiócesis de Denver y Caridades Católicas hicieron un llamado a voluntarios y donaciones adicionales, la comunidad de Colorado dio un paso al frente. Los Caballeros de Colón entregaron abrigos, las parroquias organizaron colectas de alimentos enlatados y familias e individuos limpiaron sus armarios y viajaron hasta el centro de Denver para dejar los artículos donados. Esas donaciones han salvado vidas.

Una vez más, les pedimos su ayuda. Colorado ha sido bendecido con un otoño cálido, pero, como están a punto de descubrir los recién llegados, los inviernos de Colorado son fríos. Si puedes ayudar con materiales adicionales o donaciones financieras, todos los involucrados en el ministerio de Caridades Católicas estarían increíblemente agradecidos. Si tienes tiempo y capacidad, únete a nosotros en Samaritan House o en cualquier ministerio de Caridades Católicas como voluntario.

Como dijo el obispo Rodríguez cuando bendijo una renovación de Samaritan House hace dos años: «Todos los días, Jesús cruza las puertas de Samaritan House». Hoy más que nunca tu tiempo, tesoro y talento son necesarios, y tú puedes marcar una gran diferencia en las vidas de aquellos a quienes servimos.

Las donaciones de artículos materiales siempre son necesarias y apreciadas. Si tienes alguno de los siguientes artículos y deseas donarlos a Caridades Católicas para usarlos en nuestros ministerios, puedes hacerlo en Samaritan House, 2301 Lawrence St. en Denver, entre las 9 a. m. y las 4 p. m. de lunes a viernes y de 9 a.m. a 1 p.m. sábados y domingos. Necesitamos ropa nueva o poco usada para hombres, mujeres y niños, alimentos enlatados, ropa interior nueva en el empaque nuevo y artículos de higiene personal. Para obtener más información sobre las donaciones materiales o financieras a Caridades Católicas, visita ccdenver.org.

Los voluntarios son el alma de Caridades Católicas y no podríamos servir sin ellos. Hay oportunidades disponibles el mismo día. Haz clic aquí para ser un voluntario. ¡Gracias!

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